El debate de moda

¡Vaya desayuno! Ana Obregón ha vuelto a la palestra a puerta gayola: madre con 68 años. ¡Qué escándalo! El debate ético es muy interesante. La edad, el vientre de alquiler, las leyes en tal o cual país...Mucha miga para tragar con sólo un vaso de leche.

En la antigua Roma cuando los padres no podían o no querían ejercer su paternidad dejaban al bebé en la puerta, de modo que cualquiera pudiese darle una oportunidad. Si no era así, no había futuro para la pobre criatura. Decidir ser padres creo en resumen que es una decisión egoísta. Y es lógico que así sea. Normalmente no se elige el mejor momento para el bebé, sino para la pareja. Ese egoísmo termina abruptamente desde el primer llanto, que cambia la vida de los progenitores para abrir una etapa de generosidad sin límites. En primera persona diré que nada en mi vida es más importante que mis hijos. Nada es nada, y eso sí es amor. El escándalo de Ana Obregón también se da porque es mujer. Si fuese la edad del padre y no de la madre, no sería casi ni noticia. Ojalá el debate abierto sea reflexivo y constructivo. Creo, eso sí, que sería terrible que nos dediquemos a juzgar a la persona. Basta con que juzguemos las decisiones con el máximo respeto posible. A Ana Obregón, mis mejores deseos. De su hija diremos, como manda nuestra tradición, que es muy muy guapa.