Liga Asobal
Un cuaderno de bitácora manuscrito para recoger el día a día de la "dura" temporada del Helvetia Anaitasuna
Quique Domínguez pidió a su plantilla que plasmasen por escrito las experiencias, sensaciones y lo que se "les pasase por la cabeza" a lo largo de una campaña en la que han acabado salvándose en la penúltima jornada de la Liga Asobal

Actualizado el 07/06/2023 a las 17:50
Se lo pidió a los jugadores en el primer entrenamiento de pretemporada. Una de esas tácticas de motivación y trabajo para formar equipo de las que es tan aficionado, y que cuida tanto, el técnico gallego. Acudió a la pista con un libro en blanco y lanzó el mensaje a la plantilla. El libro de esta temporada lo iban “a escribir entre todos”. Y dicho y hecho. Este martes 6 de abril, en el balance de una campaña en la que el Helvetia Anaitasuna ha acabado 13º en la Liga Asobal y se ha quedado a un paso de jugar la Final a 8 de la Copa del Rey, el técnico Quique Domínguez ha mostrado el peculiar diario de las experiencias, inquietudes, sensaciones, intimidades, enfados, alegrías y tristezas que el vestuario verdiblanco ha ido plasmando, a mano, a lo largo de estos últimos e intensos meses.
Un auténtico cuaderno de bitácora que los miembros de la plantilla han ido escribiendo a mano en una montaña rusa de sentimientos. “Ha estado en todos los entrenamientos, en la pista, y en todos los pabellones en los que hemos jugado. En todos. Y ahí han ido apareciendo muchas cosas. Es difícil hacer un mejor resumen que éste”, ha asegurado, guardándolo como “un recuerdo que va a ser difícil de olvidar”.
Y aunque ha preservado lo escrito en la mayor parte de las páginas - “hay algunos textos que no se pueden leer porque se escribieron muy ‘en caliente’ tras alguna derrota...”-, sí que, "con el permiso" de los jugadores, algunos mensajes de momentos claves del año. “El 28 de julio, en el inicio del libro, se escribe en grande y en verde: ‘Acojonante. El comienzo de un viaje inesperado’”, apuntaba el técnico. ‘Agotadora’, ‘libre de lesiones’, ‘sigue multiplicando actitud’, ‘inolvidable’, ‘llena de alegrías y buenos momentos, que aunque a veces haya baches, nos sepamos reponer y avanzar’... fueron, por ejemplo, calificativos que los jugadores escribieron sobre lo que esperaban de la temporada entonces a punto de comenzar.

La recaída de Ander Torriko el 30 de agosto -'Otra vez. Me quedo helado en el entrenamiento. Esperemos que todo sea un susto. ¡Qué injusto, qué injusto! Ander Torriko, te queremos'-; agradecimientos al ‘ejemplo’ de 'Mintxo' Ibarrola, referencias a la convocatoria de Bazán con la selección, los nacimientos de Henar (hijo de Carlos Chocarro) y de Elena (hija de Arthur Pereira) o los anuncios de las retiradas de Ibai Meoki y Carlos Chocarro han sido también capítulos de este compendio de frases.
Un manuscrito que tuvo un positivo broche con un comentario que deja entrever el gran peso que el equipo se quitó al ganar al Logroño en penúltima jornada y lograr la permanencia matemática después de mucho sufrimiento. “Por fin salió el sol. Coño. Gora Anaita!”.
La capacidad de sobreponerse , clave en una temporada “dura”

Lo ha advertido desde que ha tomado la palabra para hacer balance de la campaña. No buscaba dar excusas ni justificaciones. Ni al 13 puesto final en la Liga Plenitude Asobal ni a los resultados que se han ido dando a lo largo de la temporada del Helvetia Anaitasuna. Y Quique Domínguez es claro y directo en sus reflexiones. “No es fácil para mí hacer este balance”, explicaba el técnico gallego, quien reconoció que, en las últimas semanas cargadas de tensión por la delicada situación en la liga, durmió “menos que nunca” . “Empezamos la temporada con unos objetivos muy ambiciosos y potentes y, claramente, no hemos sido capaces de cumplirlos en lo deportivo. A lo largo del año nos hemos ido alejando de ellos”, apuntó.
“Hemos sido muy irregulares”, añadió si bien advirtió que, “seguramente la temporada no ha sido justa con nosotros”, dado el trabajo y el juego mostrado. “Después del partido ante Logroño recibí cinco mensajes de entrenadores diciendo que les parecía increíble y muy injusto que en la penúltima jornada nos estuviésemos jugando la salvación”, desveló rodeado por todo su cuerpo técnico, “el mejor. Sin ellos esto no sería posible”.
Precisamente, “el nivel de unión, de cohesión, compromiso y esfuerzo”, junto a la “capadidad de sobreponerse”, fueron las claves que el técnico dio. “Sin todo ello no hubiésemos solventado una temporada tan irregular” y en la que, como dato curioso, indicó que el resultado que más se ha repetido al minuto 10 de sus partidos “en 12 si no he contado mal, es un 7-3 a favor, 3-7 si jugábamos fuera”, decía. “El equipo, en casi todos los encuentros, ha empezado entero, fuerte, convencido, dominando… También en el Palau, en León... Pero en las segundas partes es donde ha aparecido muchas veces la cara B que, inevitablemente, va afectando, va haciendo perder confianza y generando dudas”. “Han sido innumerables golpes y partidos en los que te vas muy tocado, dolido y fastidiado para casa...pero el equipo ha sabido levantarse. "Los jugadores me han demostrado una capacidad de superación que, en muchos momentos, ha estado por encima de la mía. Yo también he tenido que fijarme y he aprendido de ellos”, reconocía también.
Domínguez, antes de destacar lo “orgulloso” que se siente de formar parte de un club que trabaja tanto por la cantera, quiso mandar un mensaje de ánimo a Manolo Cadenas, su amigo y entrenador del Ademar de León. “Está viviendo un momento delicado de salud. Y le deseo que un luchador y un competidor como él se recupere bien y vuelva a etsaren los banquillos con esa fuerza y esa energía que tiene siempre. Ojalá lo pase pronto y termine bien”, deseó.
UN FICHAJE PARA LA PRIMERA LÍNEA
Domínguez reconoció que será un reto volver a recomponer esa unión y ese espíritu de equipo tras la salida de “emblemas” del club como Chocarro o Meoki, unidas a las de Etxeberria e Izquierdo la anterior campaña, pero confía en que jugadores de mucho pese en la plantilla "den un paso adelante" como pueden ser Antonio Bazán, Aitor García, Álvaro Gastón u otros que, "sin ser de Navarra están completamente identificados con el club".
En cuanto a la planificación del equipo para la próxima campaña, Carlos García, director deportivo, confirmó que “el equipo no está cerrado” tras las reincorporaciones de Adrián Ortiz y Aitor Albizu y se trabaja “en el fichaje de un primera línea”.
García, por su parte, calificó como “dura” y “extenuante” la temporada vivida, celebrando que “el equipo no se haya roto, que haya seguido con su identidad hasta el último día” y destacando el “mérito terrible” que a su juicio tiene la permanencia después del “esfuerzo titánico” de jugadores, cuerpo técnico y toda la sección .
“Ha sido un año de aprendizaje, que nos va a hacer crecer, y en el que el primer equipo se ha salvado con nota alta, ya que no se han podido tener más dificultades. En condiciones normales, el equipo hubiera estado, al menos, entre los seis primeros”, aseguraba.