Así ganó el Tour de Francia Annemiek Van Vleuten

La victoria de Annemiek Van Vleuten en el Tour femenino, la única grande que le quedaba por ganar a la estructura de Unzué con Telefónica, tuvo una celebración austera en la Planche des Belles Filles. A las 2 de la mañana todo el equipo ya estaba descansando. El navarro Jorge Sanz, que lleva en el Movistar femenino desde su puesta en marcha en 2018, cuenta las claves de la victoria de Van Vleuten, desde la salida en París, a la llegada a la Super Planche el domingo. UN PROBLEMA ESTOMACAL OCULTADO El Tour de Francia no comenzó bien para Movistar y Annemiek Van Vleuten. El domingo 24 de julio se disputó la etapa de los Campos Elíseos. Al terminar, Van Vleuten y el equipo tomaron la clásica merienda de recuperación (arroz, yogur, muesli, un bocadillo) que cayó como un bombazo en el estómago de la neerlandesa. “Creemos que comió algo contaminado. Empezó a tener unos dolores terribles de estómago, se le cortó el hambre, no hacía de vientre y estaba bloqueada, atascada y comenzó a hincharse”, relata Sanz. “Con la ayuda del doctor conseguimos desbloquear aquello, pero al día siguiente, al levantarse nos dijo que no sabía ni si iba a poder montarse en la bici, porque no tenía fuerzas ni para hacer la maleta. La clave era conseguir alimentarla sin estropear el estómago”. La segunda etapa era una jornada de aire en la que Movistar quería haber pasado al ataque. “Tratamos de hacer ver que Annemiek estaba normal yendo siempre bien colocada y adelante, cuando en realidad no estaba bien”, recuerda Sanz. “Salvamos muy bien el día, con unas pérdidas de tiempo mínimas”. RESPIRAR EN EL STERRATO Movistar tuvo que ‘disimular’ el estado regular de Van Vleuten en carrera, y cuidar mucho su alimentación durante tres etapas, en las que cedió 1:15 con Marianne Vos. El día del sterrato, en la cuarta etapa Troyes-Aube. “Ahí Annemiek ya nos dijo que empezaba a ser ella, y a encontrarse mejor. La labor de equipo de todas nuestras corredoras en esos días fue espectacular, con un trabajo que no se ve en la televisión, pero sin el cual posiblemente no hubiéramos ganado el Tour”, analiza Sanz. Con Van Vleuten más recuperada y alimentándose con normalidad, Movistar ahorró fuerzas en la quinta y sexta etapas para jugarse el todo por el todo en las dos etapas de montaña. DAR ANTES DE QUE TE DEN El primer Tour femenino organizado por ASO (el organizador del masculino) concentró toda la montaña en los dos días finales. El sábado con la llegada a Le Markstein (se subían otros tres puertos) y el domingo con la Planche des Belles Filles. Van Vleuten y los responsables del equipo sabían bien cómo les iban a atacar. “Sabíamos que hay rivales que no son superiores a ella subiendo y que le iban a meter presión con el aire y descensos complicados. La bajada al Pettit Ballon, que la supervisamos en abril, podía ser un punto donde nos podían buscar”, explica el director deportivo del Movistar. “Lo que decidimos fue movernos nosotras, aún a riesgo de quedarnos aisladas. Queríamos que Annemiek pudiera bajar más tranquila, y que quienes tuvieran que arriesgar en la bajada fueran las rivales, para cogerle. Era un movimiento que conllevaba sus riesgos, pero nos adelantábamos”. Y sucedió como se había planteado. Van Vleuten atacó en el Pettit Ballon, abrió más hueco del que se pensaban, Deme Vollering trató de reaccionar en la subida de Platzerwasel pero terminó reventando en Le Markstein, donde Van Vleuten sacó 3:26 a la segunda clasificada, y a partir de ahí unas diferencias de escándalo. “Tenemos los datos y los dos puertos los subieron las dos a los mismos vatios, pero en el segundo puerto Annemiek le dio tres meneos gordos y abrió hueco”, explica Sanz. “Desde ahí hasta el final de la etapa fue ir dosificando esfuerzos y tiempos. Estas diferencias tan grandes las veíamos en el ciclismo masculino en los 90. En el ciclismo femenino no hay tantas ciclistas, el nivel es heterogéneo, hay que tener mucho cuidado con los esfuerzos, no todas las chicas tienen el nivel para repetir esos esfuerzos máximos. A las chicas hay que enseñarles a levantar el pie, a gestionar esos momentos de máximo esfuerzo y recuperar bien”. LAS AVERÍAS Y EL BROCHE Con unas diferencias superiores a los tres minutos, Movistar y Annemiek Van Vleuten no tenían ninguna necesidad de correr al ataque en la última etapa. De hecho, los técnicos pensaron en que fueran otras corredoras del equipo las que se filtrasen en escapadas. Sucedió que van Vleuten sufrió un pinchazo en su flamante Canyon customizada de amarillo, momento en el que las rivales aprovecharon para atacarle. “El pinchazo fue en una zona muy técnica, otros equipos decidieron jugar estrategias que son lícitas pero poco caballerosas y eso nos enfadó en el coche. En nuestro equipo no se lanza la carrera ante la avería de una rival”, comenta Sanz. “Por suerte pudimos cerrar el hueco con el trabajo de Sheyla y Aude. Le hirieron en el orgullo y no hubo perdón. El objetivo no era ganar la etapa final con Annemiek, pero atacó y le puso el broche a un gran Tour de Francia”. ¿GANAR LAS TRES GRANDES EN UN AÑO? Después de ganar el mismo año la Lieja, el Giro y el Tour, ¿qué objetivos le pueden quedar a Annemiek Van Vleuten? Por lo pronto la ciclista se ha ido una semana de vacaciones con su novio, que es español, sin bicicleta. Luego retomará la actividad, con el campeonato del mundo como objetivo. Y puede darse el caso que, de camino, pelee por la victoria final en la Vuelta a España. Con lo que podría lograr el hito inédito de ganar las tres grandes en un mismo año. “Lo ha ganado todo, menos la Flecha Valona. Es una corredora que tiene una capacidad de trabajo y entrenamiento extraordinarias”, explica. “Es increíble cómo prepara las carreras, exige que sepas todo, es hipermeticulosa, es lo que le motiva”. 1 ARLENIS SIERRA “Para mí es el descubrimiento del Tour. Sabíamos que traíamos una ciclista muy buena, pero nos ha sorprendido en muchas cosas. La capacidad que tiene, la visión de carrera que ha mostrado, una colocación excelente, mucho gas... Es una multitasking que ahora Annemiek quiere que vaya allí donde está ella porque da mucha seguridad y su compromiso es el 200%”. 2 PAULA PATIÑO “Nuestra escaladora pura, que ha hecho muy bien su trabajo en las dos últimas etapas”. 3 ENMA NORSGAARD “Es una corredora que es un diamante y que todavía tiene que descubrir qué tipo de ciclista es. Igual no es una esprinter pura, y tiene que buscar otras cosas. Es muy completa y se está terminando de asentar. Se ha metido en el esprints y ha ayudado a Sheyla y Aude ”. 4 SHEYLA GUTIÉRREZ “Es la que ha cuidado en carrera de Annemiek y que ha solventado sus puntos débiles. Es un tipo Imanol Erviti en los chicos”, argumenta. 5 AUDE BIANNIC “Ha tenido la misma misión que Sheyla, y ha estado en muy buena forma, han sido los ángeles de la guarda de Annemiek”. 6 ANNEMIEK VAN VLEUTEN “Qué decir de todo lo que ha hecho en este Tour”.

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