FÚTBOL
Sergio Ramos lanza sus dardos contra Rafa Benítez
Asume su error "de infantiles" y recuerda que también "se habla de los cambios del míster", destacando que "de los errores aprendemos todos, jugadores y entrenadores"
- COLPISA. MADRID.
Sergio Ramos llegó a la Ciudad del Fútbol sin maleta, con botas sin atar y jersey largo abierto a la concentración de la selección en la Ciudad del Fútbol de las Rozas. Una visita de ida y vuelta porque la lesión en el hombro que le ha mantenido tres fuera de los terrenos de juego con el Real Madrid le sigue molestando, el derbi lo jugó infiltrado, y causará baja para los dos encuentros de la selección. Su compañero de equipo Nacho Fernández, será su sustituto.
"Acabé muy dolorido. Estoy muy fastidiado, ahora me van a ver los médicos y a ver qué pasa. Acabé el partido bastante mal, forcé para jugar el derbi. No quiero medallas pero las lesiones tienen un tiempo de recuperación. Era un lesión de cuatro semanas y volví en dos, hay veces que tienes que forzar porque hay partidos especiales. Hay gente que valore que viniese de una lesión y otros que no. Las lesiones duran lo que duran y a veces nos saltamos los plazos de recuperación para estar en un partido importante. Hay ciertos jugadores que tenemos más responsabilidad para lo bueno y para lo malo. Al final los fallos me han hecho aprender", dijo.
Eso sí, el central llegó con ganas de hablar y mostró su malestar con su entrenador Rafa Benítez, que tras el derbi madrileño habló del error del central (sin nombrarlo) en el penalti a Tiago y que en la SER explicó que había advertido al central de que "no arriesgara en pases innecesarios" como la acción de la pena máxima del central. "El fallo del penalti fue un fallo de infantiles pero no me quita el sueño. Benítez lo que me tenga que decir me lo dirá cuando me vea. No me preocupa ni me molesta. Todos cometemos errores y no los hacemos queriendo. Por suerte Keylor estuvo acertado y no tuvo influencia en el resultado. Igual que se habla de mi error, se hablará de los cambios. Todo salió bien dentro de lo que cabe y de los errores todos aprendemos, tanto los jugadores como los entrenadores", afirmó mientras a su espalda pasaban juntos Iker Casillas, David de Gea e Isco Alcarcón, que pellizcó al andaluz mientras atendía a los medios.
El central reconoció que el equipo dio un paso atrás en el derbi: "Se hicieron las cosas muy bien pero acabamos con el equipo muy metido atrás. El Calderón es complicado y por las circunstancias del juego estás pensando que termine el partido y en lugar de ir a matar el partido y adelantar la línea, inconscientemente vas retrasando la línea. Eso es lo que pasó. Pero es fútbol, suele pasar en otro tipo de partidos". "Tampoco hay que sacar conclusiones, siempre constructivas, hicimos una gran primera parte, pudimos matar el partido y por circunstancias no se dio así, el Atlético apretó y pasamos complicaciones, nos faltó esa iniciativa de los primeros minutos en la segunda parte para matar el partido y llevarnos los tres puntos, terminamos con el equipo demasiado atrás".
Además, Ramos también respondió a su entrenador, que llegó a decir que el Real Madrid son Cristiano y diez más: "Cada uno tenemos nuestra opinión. En el fútbol no hay ningún futbolista imprescindible, aunque no quiero sacar titulares en contra de mi entrenador y mucho menos de mi capitán".
Tras charlar con el doctor Juan José García Cota, galeno del equipo médico de la selección absoluta de fútbol, abandonó la Ciudad del Fútbol son sin antes sacar la cara por Gerard Piqué, pitado en los dos últimos partidos y con el que se especula no tiene conexión lejos del campo: "Piqué y yo ya tuvimos una conversación. Como dijo él en la rueda de prensa a día de hoy tenemos una relación magnífica, incluso mejor que en otras temporadas. Somos dos personas muy claras que decimos todo lo que pensamos".
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