El tren aún no ha recuperado 650.000 viajeros en Navarra y el avión, 130.000

La herida infringida por la covid a la movilidad - y por extensión a medios de transporte- continuó sangrando durante 2021. Ni el tren ni el avión lograron en Navarra el objetivo de recuperar el número de pasajeros que registraban en 2019, antes de la irrupción de la pandemia. Conforme se sucedían las olas en el calendario, sus expectativas se quedaban en tierra y la incertidumbre se asentaba como el pasajero más incómodo de su actividad. Al acabar el año, el ferrocarril había transportado a poco más de un 60% de los pasajeros de hace dos años, mientras que el avión todavía tenía pendiente reconquistar a un 55% de los usuarios. En total, entre ambos medios, 780.000 pasajeros menos que en 2019, aunque casi 380.000 más que en 2020, un ejercicio con una pérdida histórica de usuarios. En concreto, Renfe cerró 2021 con 657.000 viajeros menos que en 2019 y el aeropuerto de Pamplona con 130.000 usuarios menos. El balance de 2021 en estos dos medios de transporte colectivo evidencian que la actividad económica siguió afectada durante el año pasado. Yen lo que va de año aún no hay signos claros de cuándo ni cómo el tren y el avión recobrarán su pulso. Incluso, se desconoce si lo harán en las mismas condiciones, ya que muchas empresas han encontrado en las videoconferencias online una forma de ahorrar en gastos de desplazamientos y, al mismo tiempo, de mejorar su productividad. Los viajes por turismo, en cambio, tienen mejor pronóstico, aunque en 2021, las maletas de muchos navarros volvieron a quedarse en el trastero o, por el miedo a los contagios, consideraron más seguro desplazarse en coche privado. LOS TRENES ALVIA CON LA MITAD DE PASAJEROS Los trenes Renfe, con origen y destino en Navarra, transportaron durante el año pasado a poco más de un millón de personas (1.000.700). La cifra supone 351.200 viajeros más con respecto a un 2020, cuando el número de pasajeros del operador ferroviario se desplomó hasta los 650.000 y se quedó muy lejos de los 1,6 millones de usuarios que se alcanzaron en el año previo a la pandemia. Por tipos de trenes, uno de cada dos pasajeros que viajó en un tren el año pasado lo hizo en los de alta velocidad (Alvia), que sobre todo enlazan la capital navarra con Madrid y Barcelona. Un total de 517.800 personas, todavía un 48% menos que los 990.000 pasajeros que elegían este medio en 2019. Renfe sólo ofrece el 75% de los servicios de larga distancia que había antes de la pandemia, pero el operador se prevé que en julio se hayan recuperado todos los trenes que tenían antes de la pandemia. Actualmente hay seis posibilidades para viajar a Madrid y otras seis para regresar. De ellas la mitad son en Alvia directo y el resto son trenes con trasbordo en Zaragoza . En el caso de Barcelona hay cuatro horarios diarios de ida (dos Alvia y dos con trasbordo) y tres de vuelta. Los trenes regionales (media distancia), en cambio, se han recuperado mejor que los Alvia porque más gente se ha animado a viajar en trayectos cortos. Según datos del operador, el número de viajeros que utilizó este servicio público durante el año pasado fue un 26,7% menor que en 2019, cuando se contabilizaban 650.000 pasajeros. En concreto, los regionales fueron utilizados por 482.900 personas en 2021, lo que supone unos 175.000 pasajeros más que en 2020. EL AEROPUERTO, UN TERCER AVIÓN A MADRID EN BREVE El sablazo que el coronavirus ha asestado al aeródromo navarro es de tal magnitud que puso fin a la actividad de la aerolínea germana Lufthansa, que había insuflado vitalidad al enlazar Pamplona con Fráncfort. Tras 5 años de aumentos consecutivos, en 2020 el aeropuerto registró 84.000 pasajeros. Nada que ver con los i 250.000 de 2019. El año pasado, el aeropuerto solo creció en 28.500 pasajeros y cerró el ejercicio con 112.500 usuarios (el 45% de la actividad prepandemia) En la actualidad, los vuelos que están operando son dos frecuencias diarias a Madrid (una de mañana y otra de tarde) por parte de Air Nostrum (filial de Iberia) frente a las cuatro y cinco que había en 2019. Sin embargo, de cara a la nueva temporada de verano habrá tres conexiones diarias los lunes, miércoles y viernes ( salidas de Pamplona a las 9.20, 13 y 22 horas). Además, existen ahora tres frecuencias semanales de la compañía canaria Binter (dos a Las Palmas y una a Tenerife Norte). Se cumplen dos años de pandemia y la curva de recuperación de los viajes es demasiado lenta como para no desesperar a los operadores y poner en riesgo empleos. Hay empresas que han cerrado y faltan frecuencias y conexiones para recuperar la oferta anterior. El panorama para las compañías aéreas presenta más turbulencias que para el tren porque, al dedo acusador puesto sobre ambos como propagadores del virus, el avión suma la ‘culpa’ de ser un gran contaminador por sus emisiones de CO2. En resumen, una crisis en un contexto que empuja hacia la ‘movilidad sostenible’ cuando la covid justo potencia lo contrario: el coche privado. Tremendo reto. Las autoridades han puesto restricciones al transporte colectivo, al igual que a sectores como la hostelería. Pero, al final, cepas chinas, sudafricanas o de cualquier otro rincón han llegado a Navarra y vaya usted a saber hasta dónde ha viajado la autóctona carriquiri. Las empresas de autobuses, al igual que las ferroviarias y las aéreas, continuaron padeciendo las consecuencias de la pandemia y de las medidas adoptadas en aras de reducir contagios. El volumen de pasajeros en autobuses en 2021 en Navarra fue un 45% inferior al que se registraba antes del inicio de la llegada del covid, según estiman desde la dirección general de Transportes y Movilidad Sostenible del Gobierno de Navarra. En 2019 se contabilizaron 2.661.991 viajeros en los autobuses interurbanos. En 2020 su número se redujo a poco más de 1.110.000 usuarios y en 2021 el volumen creció hasta 1.570.000 viajeros. En total, en torno a 450.000 pasajeros más que el año del inicio de la pandemia, de manera que a las concesionarias de pasajeros de autobús interurbano todavía les queda por recuperar más de un 1.100.000 pasajeros. El sector del transporte de Navarra de viajeros por carretera se presta a través de unas 38 concesiones operadas por veinte empresas. “La foto de los viajeros durante 2021 en su conjunto es mejor que la del 2020, evidenciándose una progresiva recuperación”, apunta la directora de la citada dirección, Berta Miranda. La directiva reconoce que muchas personas han optado por el vehículo privado y que cuesta recuperar pasajeros. Con este fin, avanza Berta Miranda, el Gobierno prevé realizar campañas “para concienciar a la ciudadanía de la necesidad de utilizar siempre que sea posible modos de transporte sostenibles como los autobuses interurbanos”.

El tren aún no ha recuperado 650.000 viajeros en Navarra y el avión, 130.000

Ambos aumentaron los usuarios en 2021 pero están lejos del nivel de 2019

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