Ayuntamiento
La oposición abandona el pleno en Pamplona por el uso del voto de calidad de Maya
EH Bildu, PSN y Geroa Bai afirman que Maya tenía que respetar la dimisión de Abaurrea que altera las mayorías

- Myriam Munárriz
- EFE. Pamplona
La tensión que se vivió el jueves desde el inicio del pleno explotó a las siete menos cuarto de la tarde cuando la oposición (EH Bildu, PSN y Geroa Bai) abandonó el pleno que había comenzado a las cuatro y media con el reproche compartido de que el alcalde debía respetar “las mayorías democráticas”. El anuncio de la dimisión de Joxe Abaurrea (EH Bildu) deja al equipo de gobierno de NA+ en tablas con sus trece concejales frente a los ahora seis de EH Bildu, cinco de PSN y dos de Geroa Bai. Un empate que se rompe con el voto de calidad de presidencia.
Abaurrea avanzó que dejaba el consistorio tras conocerse el viernes el fallo del Juzgado de lo Penal nº 4 donde se dirimió el rifirrafe en uno de los balcones del consistorio cuando en el chupinazo de 2019 el edil intentó sacar una ikurriña y, según recoge la sentencia, terminó agrediendo a dos policías y a la edil de NA+ Carmen Alba. La condena por atentado y lesiones conlleva seis meses de inhabilitación para ejercer un cargo público.
Y ayer ya no acudió al pleno por lo que la oposición pidió a Maya que en las votaciones se reflejara el resultado electoral de mayo: 13 el equipo de gobierno, 14 entre EH Bildu, PSN y Geroa Bai. ¿Cómo? Haciendo que uno edil del grupo de la alcaldía alineara su voto con el resto hasta que no se haga efectiva la sustitución de Abaurrea.
Una demanda que no tenía mucho que ver con el pleno del jueves sino con el extraordinario convocado para el día 29 para aprobar los presupuestos. NA+ no cuenta con el apoyo de PSN que le permitió el año pasado sacar adelante la propuesta económica. Lo que nadie se podía imaginar es que no iba a necesitar a nadie gracias a la ausencia de Abaurrea. Y Maya había dicho: “El Ayuntamiento seguirá el calendario que haya que seguir para la sustitución de este concejal”. La oposición lo tuvo claro: el presupuesto iba a pleno sí o sí y, al parecer, haciendo valer NA+ el voto de calidad de la presidencia.
Por eso el pleno comenzó con los portavoces de EH Bildu, PSN y Geroa Bai (Joseba Asiron, Maite Esporrín y Patxi Leuza) queriendo intervenir “por una cuestión de orden”, y con el mismo reproche: “Debe respetar las mayorías democráticas”. A los tres, Maya les respondió lo mismo: “No es una cuestión del orden”. Y siguió el pleno hasta el punto ocho, en el que tocaba debatir una declaración de EH Bildu sobre ayudas a la rehabilitación de viviendas.
¿Por qué entonces? Porque el punto anterior, una moción de NA+ que exigía al Ejecutivo foral un convenio para financiar Servicios Sociales, salió adelante con ese voto de alcaldía. La muestra palmaria, según la oposición, de que no se iba a reflejar a futuro ese 14 a 13. Y abandonaron el pleno.
Maya hizo entonces un receso y, a la vuelta, el secretario indicó que se podía continuar ya que había quorum suficiente, marcado con un mínimo de un tercio. Pero, añadió, no se podían debatir ninguna de las propuestas presentadas por la oposición porque, para votarse, debía haber al menos un miembro del grupo proponente.
Así, se quedaron sobre la mesa - o “decayeron”, en lenguaje técnico- las ayudas para rehabilitación de EH Bildu, propuesta del PSN sobre recomendaciones de la Comptos y analizar los factores que generan miedo en las mujeres al caminar por la noche, además de otra extraordinaria sobre los beneficios por la venta de terrenos municipales. Igualmente se dejó fuera una institucional acerca del Día del Migrante y NA+ retiró la suya para debatir la sentencia de Abaurrea.
Precisamente el pleno se cerró, a las siete de la tarde, dando cuenta de la renuncia del concejal abertzale. “Podía haber estado aquí toda la sesión, si no ha venido es porque no le ha dado la gana”, decía Enrique Maya al término del pleno, justificando así que hubiera hecho valer el voto de calidad de la presidencia. ¿Y a futuro? La respuesta, si no hay sustituta para Abaurrea, el día 29.
“Asiron no respetó esta mayoría con una concejal socialista enferma”
“Por qué tengo que obligar a alguien de mi grupo a que vote con la oposición? No es culpa mía que Abaurrea haya tenido que dimitir. Y no olvidemos el por qué lo ha hecho. Que parece que se nos olvida que hay un fallo judicial por atentado y lesiones”, dijo Enrique Maya al término del pleno. “Lo que no voy a hacer es respetar el sentido del voto de un concejal que por querer poner una ikurriña patea y muerde. Que no he sido yo quien lo ha inhabilitado”.
Pero, para Joseba Asiron (EH Bildu), y así se lo dijo en el pleno cuando justificó su marcha, el que el alcalde hubiera hecho valor su voto de calidad en la moción presentada por su grupo había sido una acción “injusta e indigna”. “De indigno a indigno”, le replicó el primer edil, “usted no respetó esa mayoría en la pasada legislatura cuando era alcalde y se ausentó por enfermedad Patricia Fanlo (PSN)”. También le reprochó a los socialistas que se sumaran al abandono entre protestas de poca ética. “¿Su partido me va a dar lecciones a mí con lo ocurrido en Huarte y en Estella?”. No hubo debate con Geroa Bai porque sus dos concejales se marcharon del salón cuando el alcalde les dijo si querían oír sus explicaciones.
“FALTA DE RESPETO”
Para el primer edil, el gesto de la oposición supuso una falta de respeto. “No ya a mí o a mis compañeros, sino a toda la ciudadanía e incluso a los periodistas que nos siguen a través d e internet. Ya vemos lo que les importa sus mociones. Ni tan siquiera la institucional sobre los migrantes. A mí Joseba Asiron me echó de un pleno y cuando me pidió volver no se me ocurrió hacerme el digno, sino que regresé porque entendía que en primer lugar me debía a mis votantes y también al resto de la ciudadanía. Hay que debatir los temas, siempre”.
El alcalde reconoció que le había sorprendido -en sus palabras- el seguidismo de los socialistas al plantón de EH Bildu y Geroa Bai. “No lo hicieron cuando no se respetó la mayoría con la ausencia de Patricia Fanlo”. Y rechazó el argumento de la “mayoría democrática”. “No es democracia lo que ellos digan. Quizá sea democracia, pero eso no lo valoran, que alguien tenga que dejar su puesto porque le han metido seis meses de inhabilitación. ¿Y lo tenemos que pagar en NA+?”.