Pamplona, a pie de calle
Beer Station, el café espectáculo del barrio de San Juan que marcó una época, cambia de dueños
Tras la reciente jubilación de sus dueños, el 31 de mayo se inaugura el Nuevo Beer Station, gestionado por Rosa, una hostelera de origen chino

Publicado el 22/05/2023 a las 12:56
Miles de horas de karaoke, cientos de conciertos, espectáculos, monólogos, despedidas de soltero y soltera, fiestas de fin de curso… El bar y café espectáculo Beer Station, icono de la noche pamplonesa, ha cerrado una etapa de 21 años con la jubilación de sus dueños. Han optado por una despedida discreta, con los clientes más fieles. El local ha sido alquilado por una hostelera de origen chino, Rosa, que junto con su marido e hijo ha montado en los últimos años otros dos establecimientos en Pamplona, el restaurante Kung Fu Ramen, en Iturrama, y Hutaoli Music & Bar, en la avenida Pío XII. El 31 de mayo será la inauguración del Nuevo Beer Station tras una pequeña reforma. Entre otras cosas, contará con una gran pantalla de 8 metros cuadrados para ver los partidos de fútbol.
Hace varios años, los dueños del Beer Station pusieron el local a la venta con intención de jubilarse, pero la pandemia lo complicó todo. Encontrar hosteleros dispuestos a tomar las riendas de un local tan grande no ha sido fácil. A finales de abril echaron finalmente la persiana. “Nos hubiera gustado hacer algo más especial, porque estamos muy agradecidos a todas las personas que nos han acompañado estos años, pero estábamos realmente agotados”, expresa José María Arbeloa, uno de los socios.
Situado en la manzana de la calle Monasterio de Aberin y San Roque, el Beer Station nació el 17 de diciembre de 2002 como cervecería internacional temática de Heineken, aunque luego se desvincularon de esta marca. Pero la historia de este local se remonta a décadas atrás, con José María, José Juan y Paco como socios y amigos. “Yo empecé como portero en la discoteca By-By”, rememora Arbeloa. Y Paco García, que era saxofonista de Los Welcome, empezó con el tío Enrique, en el Villa Concepción, pub de estilo colonial. En este local de la calle Aberin estos hosteleros abrieron el Salón Express en la década de 1980. Después compraron el Bass, que estaba contiguo, y abrieron el Forum. Finalmente unieron ambos locales y así surgió un gran café espectáculo de 450 metros cuadrados.
El Beer Station ha conservado desde sus inicios su decoración como estación de tren de finales del siglo XIX. Destacan los dos vagones de tranvía, además de un espacio central con barra y un escenario, un comedor con una segunda barra y escenario y un cuarto frío en el que se conserva la cerveza fresca. Era un concepto novedoso en su momento, siguiendo la estela de Madrid o Barcelona. La gastronomía también tenía su toque de autor.
Todos sus socios se llevan grandes recuerdos. “Hemos vivido etapas muy bonitas, sobre todo entre los años ochenta y el comienzo de siglo. Hace poco vino una pareja que nos contó que se habían conocido aquí y quería celebrar su aniversario", expresa.
A su escenario se han subido Melendi, Ana Torroja, Los Secretos, Serafín Zubiri, Patricia Klaus… “Teníamos relación con Los 40 Principales y nos traían por la noche a artistas a los que promocionaban”, explica José María Arbeloa. El Beer Station ha quedado inmortalizado en la película ‘Los asesinatos de Goya’, protagonizada por Maribel Verdú, y en numerosos vídeos musicales. Además, en Sanfermines el relaciones públicas Julio Ayesa traía a personas internacionales como uno de los Kennedy o una de las hijas de Hemingway.
Paco y José María han metido muchas horas como DJ y también fueron los primeros en traer el karaoke a Pamplona. “Al principio eran discos de vinilo, después ya vinieron los CD y ahora está ya todo digitalizado”, comenta José María. El Beer Station ha acumulado 10.000 títulos para interpretar en vivo y en directo. Futbolistas de Osasuna y del Sporting de Gijón han sido algunos de los clientes que se han lanzado al escenario.
Estos hosteleros también han sido pioneros con los monólogos. La agenda de eventos se mantuvo hasta marzo. “Estos últimos años han sido más complicados, con la pandemia. Nuestro deseo era habernos jubilado antes. Ha estado mucho tiempo el local a la venta”, comentaba José María.