Hay un problema para encontrar determinados perfiles profesionales. Esto no solo afecta a Navarra o a España, es un problema que se está produciendo en muchos países europeos. Hay múltiples variables que afectan a esta situación: falta de atractivo de algunos sectores, condiciones laborales asociadas son variables que están repercutiendo en esta carencia. En algunos casos, también se da una diferencia entre las expectativas laborales de determinados perfiles y la realidad. Desde el Gobierno de Navarra se está haciendo un importante esfuerzo por trabajar junto a estos sectores para buscar soluciones conjuntas. Se están dando pasos importantes para a través de formación ofrecer a las personas demandantes de empleo oportunidades laborales en sectores con carencia de profesionales.
En los casos de percibir prestaciones como la Renta Garantizada (RG), por una parte, las administraciones foral y local están obligadas a ofertar apoyos, bien sociales, bien laborales o bien mixtos, a lo que se une diversos incentivos al empleo en la prestación y en la contratación; y eso es lo que estamos haciendo todas estas administraciones con una buena parte de las personas y familias perceptoras de RG. Pero también estas personas tienen sus obligaciones, es por ello que percibir las prestaciones les exige está disponibles para el empleo y aceptarlo cuando se les ofrece, así como participar en las actividades de mejora de la empleabilidad o de la inserción; existiendo mecanismos mensuales de control para el seguimiento de estas obligaciones.
Los datos demográficos indican que la sociedad española ha envejecido en las últimas décadas y la tendencia indica que este fenómeno va a ir a más. Como suelo decir, el envejecimiento no hay que verlo como un problema sino como un reto. Hay que tener en cuenta que el envejecimiento se está dando también entre la población activa. En el caso del empleo, un dato que ilustra este hecho, del total de personas afiliadas en Navarra, datos de afiliación media de febrero de este año, el 36,1% tiene más de 50 años. Se trata exactamente de 107.878 afiliaciones. Hace sólo una década el porcentaje, aunque también significativo, era diez puntos menor, un 26%.
Y desde la perspectiva del desempleo, otro dato que conviene tener muy en cuenta y que explica, en parte, el aumento del desempleo estructural y esa dificultad de reducir de manera más intensa el paro. Del total de personas desempleadas en Navarra, el 27,6% tienen más de 54 años. Se trata de 8.944 personas. En ese sentido, el edadismo, o discriminación por edad, es un fenómeno que tenemos que paliar y que produce efectos no deseados abocando a personas mayores de 50 años a situaciones de desempleo de larga duración cuando, por otra parte, hay carencia de trabajadores. Un elemento estratégico para poder abordar este fenómeno es la formación continua. La formación y el reciclaje de las personas trabajadoras a lo largo de toda la vida tiene que ser la principal herramienta para que retos como la transformación digital no se conviertan en barreras que lleven a las empresas a prescindir de trabajadores senior por temor a que sus competencias estén obsoletas.
Cada vez es menos frecuente que un trabajador agote su vida laboral en una misma empresa. No es una cuestión de futuro, ya hay una evidente proliferación de puestos con gran flexibilidad y son requeridos de esa forma. Asimismo, van a seguir existiendo en un número relativamente alto ocupaciones más estables y vinculadas a los territorios y las personas, aunque sería muy recomendable que estas ocupaciones mejoraran, en algunos casos (cuidado de personas, servicios a la comunidad, etc.), de forma notable sus condiciones de trabajo para garantizar la fidelidad y para que se mejore la confianza en el futuro personal y familiar.
Mientras que los modelos laborales van cambiando de forma ostensible, los imaginarios sociales lo hacen de forma más lenta y esos produce desfase entre la realidad y las expectativas lo que suele conllevar posiciones defensivas que, en este caso, se constatan en la tardanza en la emancipación y en las reticencias a formar familias.
Va a ser necesario reconducir el modelo social y laboral para permitir procesos de estabilidad personal al margen de la volubilidad del mercado de trabajo. Sólo una política que garantice la estabilidad de ingresos (o servicios) puede revertir la situación y mejorar las tasas de natalidad.
En cuanto a el elevado porcentaje de personas paradas con bajos niveles de formación académica, primero hay que tener en cuenta que una cuestión es el nivel que figura en los registros y otra diferente el tipo de capacitación como el sistema de formación para el empleo. Y en cuanto a si se pueden diseñar itinerarios formativos para mejorar la capacitación. Se puede, se debe y se está haciendo. Desde Gobierno de Navarra se ha desplegado una batería de medidas muy amplia que se ha visto reforzada con fondos europeos cuya finalidad es precisamente el diseño de itinerarios formativos que mejoren la capacitación profesional de desempleados que cuentan con bajo nivel de cualificación.
Conviene huir de la autocomplacencia, pero la realidad es que se está haciendo un esfuerzo importante. Creo que vamos en la dirección correcta tanto en calidad como en cantidad. La formación para personas trabajadoras, desempleadas u ocupadas goza de muy buena salud. Nunca en Navarra ha habido una oferta tan amplia para personas desempleadas: formación acreditable, acreditación de la experiencia profesional, formación para el trabajo cada vez más vinculada a las necesidades reales de las empresas navarras, etc. Por poner un ejemplo: con datos recién extraídos de la memoria del SNE-NL de 2022: participaron en alguna acción formativa 17.205 personas, un 12,2% más que el año anterior, de las cuales prácticamente la mitad, 8.563, fueron mujeres. Del total de participantes, el 42,2% (7.273) estaban en situación de desempleo.
Miriam Martón Pérez es la directora gerente del Servicio Navarro de Empleo - Nafar Lansare
Diario de Navarra continúa esta semana con su cobertura especial para hacer un balance de los grandes temas de la legislatura y para debatir sobre los retos que nos plantean hacia el futuro. Esta semana se aborda el reto del empleo, un asunto sobre el que reflexionar por medio de artículos, opiniones de expertos, infografías, foros de debate en vivo y participación ciudadana