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Turismo Navarra
12 Piscinas naturales en Navarra
¿Crees que en una región de interior no hay lugares de ensueño para disfrutar de un baño en plena naturaleza? En Navarra, existen doce zonas de baño fantásticas donde combatir el calor este verano.
Publicado el 21/07/2022 a las 06:00
Quizá estabas pensando en un destino de playa para estas vacaciones para refrescarte en el mar. Sin embargo, te seduce más la naturaleza, el turismo rural, la tranquilidad de un lugar no masificado, el silencio… ¡En Navarra, no tienes que renunciar a nada! Contamos con 12 lugares de baño naturales habilitados y con control de calidad de sus aguas para que disfrutes de un simple chapuzón o de multitud de actividades acuáticas.
3 PISCINAS DE MONTAÑA
¿Te encanta darte chapuzones y te gusta el agua bien fresquita? En la montaña al noroeste de Navarra, tienes tres piscinas naturales que te encantarán.
El río Araxes, a su paso por Betelu, forma un pequeño remanso de agua a tan sólo cuatro kilómetros del lugar en el que nace. Podrás nadar entre truchas, tirarte por sus toboganes, visitar la bonita localidad de Betelu y disfrutar del impresionante paisaje de esta vertiente cantábrica de Navarra.
Un poco más al sur, a su paso por Zudaire y Artavia, el río Urederra y sus aguas provenientes de la Sierra de Urbasa-Andía, nos regalan otras dos piscinas naturales que harán las delicias de cualquier bañista. En Zudaire, la corriente fluye tranquila gracias a una presa hidroeléctrica que retiene la corriente y en Artavia podrás disfrutar del agua bajo su precioso puente románico.
LAS PLAYAS DE NAVARRA
Si quieres tener la sensación de estar en la playa, pero sin renunciar al verde de las montañas, aquí tienes tres océanos en mitad de la naturaleza.
El embalse de Alloz, cercano a la localidad de Estella-Lizarra, es un lugar privilegiado para disfrutar de los deportes acuáticos, la pesca o el baño. Si además te gusta al windsurf, la vela, o los paseos en barco, la Escuela Navarra de Vela te lo pone muy fácil para surcar las aguas turquesas de Alloz.
En las proximidades de Nagore, se halla la desembocadura del río Urrobi rodeado de un paisaje espectacular, en el que encontrarás dos playas: la de Angordoi, que al ser la más cercana al pueblo te permite combinar baño con paseo por la localidad, y la de Arce, ubicada junto a una de las muestras del románico rural más singulares de Navarra, la iglesia de Santa María de Arce.
Descendiendo hacia el sur y ya cerca de Tudela, te espera la piscina natural más meridional de todas: La Balsa El Pulguer. De temperatura templada y aguas salinas, en este importante refugio para las aves, además de darte un baño puedes practicar deportes náuticos en la zona delimitada para ello. Combina el baño con una escapada urbana a Tudela o una ruta por el desierto de las Bardenas Reales, Parque Natural y Reserva de la Biosfera.
CHAPUZÓN URBANO
Si lo que te gusta es combinar planes, aquí tienes la oportunidad para meter la cabeza bajo el agua sin renunciar al turismo cultural y los placeres del paladar. A escasos kilómetros de Pamplona, en la localidad de Beriáin, te espera la Balsa de La Morea. La balsa cuenta con una calidad de aguas excelente y en ella se puede practicar vela. Es la opción perfecta si en una escapada a la capital de Navarra quieres acabar el día de “playa” disfrutando de su casco histórico y sus bares de pinchos.
También la localidad jacobea de Estella-Lizarra tiene su propio manantial de agua salada. Dice la tradición que sus aguas, con una elevada concentración de sales, son ligeramente termales y tienen efectos curativos para la piel. La temperatura del agua permanece constante durante todo el año, lo que la convierte en una opción de baño perfecta en cualquier estación. Con el cuerpo renovado, ya podrás disfrutar del impresionante patrimonio histórico y enogastronómico de la capital de río Ega.
EL AGUA DE LOS PIRINEOS
El Valle de Roncal es el valle pirenaico por excelencia de Navarra. Las aguas que nacen en esta zona montañosa dejan a su paso singulares gargantas, balsas y piscinas fluviales. Son verdaderos lugares de fantasía en los que zambullirse.
El primero de ellos es el que se forma en Uztárroz. Todos los veranso, retienen el río a su paso por el puente creando una estupenda y refrescante piscina natural para goce de locales y visitantes.
Un poco más al sur, a su paso por Burgui, el río Esca crea una agradable zona de baño con su merendero y fogones para pasar todo el día, justo aguas abajo de la presa de las históricas Almadías.
Y, finalmente, en Navascués, te toparás con un coqueto paraje formado por las aguas embalsadas de la Foz de Benasa. Una opción tranquila y de clima más mediterráneo para los bañistas menos acostumbrados a las frías aguas de los Pirineos.
