Hierro, papel y electricidad. Al abrigo de sus recursos naturales –minerales, agua y bosque– los habitantes de Orotz Betelu y Olaldea han ido construyendo un pasado común que nos remonta a la primera industrialización. Tras los cambios sociales de los años 60 que conllevaron un importante despoblamiento, estas bellas poblaciones –que conforman un único ayuntamiento– se muestran como un enclave tranquilo, rodeado de naturaleza. Ubicadas entre los valles de Arce y Aezkoa, el río Irati sigue siendo principal protagonista de su identidad.